SD COMPOSTELA 0-1 XOVE LAGO, UN PASO ATRÁS.

TOLEDO; FANECA, CHOLO, JIMY (CORIA), ADRIÁN MATO (LUIS); DAMIAN, PATO, BOCHA (ROCHA), ROBERTO; CLAUDIO y ADRIÁN.

No todos los domingos de piñatas so fiesta, desde luego el de ayer no lo fue para la parroquia compostelanista. La derrota frente al Xove nos deja un poco tocados, sobre viendo los marcadores que nos ofrece la jornada en la preferente. Pero si algo tiene la esedé que hacer, es levantarse y seguir caminando, no queda otra.
Lo único positivo de ayer, es el debut de este chaval nuevo, Rocha, que se intentó dejar ver, pero quizás no estaba el campo para el juego que me pareció intentaba desplegar.

El partido comenzó como todos los de la esedé, con dominio del juego y con el rival dejando hacer. Así, fruto de una combinación de Damián y Claudio, llegó la primea ocasión, clarísima, para los nuestros. Damián falla solo delante del portero, mandándola muy escorada. Roberto Piñeiro y Jimi, por la banda izquierda, eran un peligro constante e intentaban desbordar a los defensas lucenses.
El Xove, a velas vir, consiguió lo que nadie se esperaba, adelantarse en el marcador. Un penalti cometido por Adrián Mato, que jugaba como lateral derecho ante las ausencias que le dio a la postre los tres puntos. Toledo se tiró hacia el lado correcto pero no pudo atraparlo. Iban quince minutos de partido y la esedé entró en una caraja de otros quince minutos que no se daba sacudido. El centro de campo estaba casi desaparecido y solo las entradas por banda de Damián y Roberto, el buen hacer de Cholo y la entrega de Claudio, consiguieron mantener el pulso hasta el último cuarto de hora final, donde la esedé, ya con todos sus hombres al cien por cien, se volcó de manera clara en la meta del Xove. Ocasiones las tuvimos, pero sobre todo a balón parado, donde no se acertó como contra el Vizoño.

William debió de pensar que el partido estaba casi acabado, porque el cambio que hizo me pareció un poco “a lo loco”, que dirían los Tonechos. Dejó a Adrián y a Bocha en el banquillo, y puso a Luís y a Rocha, el debutante, que acompañaría a Pato en el medio campo. Otra vez con tres defensas, arriesgando al máximo en un campo que yo no lo parecía, sino que era un patatal en su parte central.

Se intentó, sobre todo a balón parado, pero el Xove jugó con mucho acierto sus bazas y perdió todo el tiempo que quiso, con la permisividad de un árbitro que por algún momento dio la sensación de venir a reírse de nosotros.
Posteriormente, William dio entrada a Coria por Jimi, poniendo a nuestro mejor hombre en ataque, Roberto, como lateral izquierdo, y ahí, entre tanto desorden, se perdió el fútbol combinativo y las ideas; solo las jugadas individuales pudieron equilibrar el marcador, como la que tuvo Damián que se fue alta por muy poco. Los visitantes pudieron ampliar el marcador en un contragolpe que los pies de Cholo pudieron desbaratar.

El Xove celebró la victoria como si hubiese ganado la liga, tres puntos que les dan mucho aire, y los nuestros se fueron disgustados, entre el enfado de la parroquia y el mal hacer del arbitro, que aun por encima, se lució con la cantidad de tarjetas que nos enseño, algunas justas, y otras incomprensibles; no se puede enseñar amarilla a dos jugadores por no enseñarles las botas, cuando el terceto arbitral sale cinco minutos tarde, pasando de todo, como se estuviesen tomando unas tazas en el vestuario. Ellos son los primeros que deben de hacer bien su trabajo.

Hemos perdido una batalla, pero no la guerra, ahora solo queda aprender de los errores, y pensar en el Valadouro. Y bueno, rezar para que no llueva y el campo no esté tan MAL como ayer, es vergonzoso que algo que se ha hecho con el dinero de todos no se cuide como debiera.

Resumen de El Correo Gallego.