Era una jornada que en buena parte resultaba favorable a los intereses de la esedé. La gran mayoría de los rivales por la permanencia habían obtenido resultados negativos y todo lo que fuese sumar tres puntos nos iba a dar casi una vida extra. El resultado final ya nos dice que, finalmente, no pudo ser.
Y no porque la esedé no lo intentase. La predisposición y la actitud, en la primera mitad, nos muestran a una esedé que busca el gol, crea oportunidades y que no marca por muy poco. Los primeros 25 minutos nos dejan dos oportunidades clarísimas, una de Yavhé, y otra de Joselu, esta última, desbaratada por el portero.
El rival, un conjunto ordenado, que sabia lo que tenía que hacer para ganar, no creo peligro, en la primera mitad, pero si dió muestras de que sabía a lo que venía.
Fuera de esos primeros 25minutos,el partido ya cambió y se fue acomodando mas a lo que el Guijuelo quería. Su presión a la salida del balon blanquiazul, ya incomodaba tanto que solo el balón arriba desahogaba esa situación.
La segunda mitad, empezó con un bajón incomprensible de la esedé, tanto en actitud como en concentración, y,fruto de eso, vienen los goles, goles que pueden clasificarse como tontos,inauditos, raros, pero goles al fin y al cabo. El gol, tambien es para quien lo busca. El Guijuelo lo buscó, y lo encontró, hasta en dos ocasiones.
Fredi lo intentó con un doble cambio, pero esta vez, no pareció surtir efecto. Solo al final, en un despiste de una zaga Salmantina que, también falla, a pesar de ser la que menos goles encaja, Diego Rey logra anotar el gol del honor, a falta del descuento.
La semana se va a hacer muy larga, y, nuestro próximo encuentro, fuera de casa, en Zamora, no invita al optimismo. Pero bueno, en estos momentos incomodos y de mala leche, es cuando los verdaderos compostelanistas salen a la luz.
Jugaron por la esedé: Adrián, Borja (Jesus Varela), Catu,Taboada, Jimmy, Jordan, Gonzalo, Yavhé, Pelaez (Diego Rey), Fondevila (Nacho) y Joselu.
Album de fotos del partido.
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